¿Cómo prepararse para realizar un voluntariado en Cabo Verde?
Hacer un voluntariado en Cabo Verde puede ser una experiencia enriquecedora, pero también desafiante. Te contamos todo lo que tienes que saber al respecto.
Perdido en mitad del Océano Atlántico y a unos 600 km de la costa de Senegal encontramos un archipiélago de diez islas volcánicas que conforman Cabo Verde, uno de los países más democráticos de África. Dueño de una rica herencia africana, europea y brasileña, este paraíso de playas volcánicas y cultura criolla también enfrenta desafíos que afectan el bienestar de su población. De allí que un voluntariado en Cabo Verde se convierte en una oportunidad única de conocer un país africano excepcional, a la vez que dejas tu granito de arena.
Si bien Cabo Verde se caracteriza por su estabilidad política, aproximadamente un 30% de su población vive bajo el umbral de pobreza, sobre todo en las islas más alejadas como Santo Antão o Maio, donde las cifras se acentúan. La falta de empleo formal, la escasez de agua potable, el limitado acceso a servicios médicos y las brechas educativas son algunos de los desafíos más urgentes. Detrás del paisaje de postal de Cabo convive una realidad marcada por el aislamiento geográfico, el desempleo estructural y una economía fuertemente dependiente del turismo.
Es en ese contexto donde el voluntariado adquiere un sentido profundo. Porque no se trata de asistir, sino de compartir. De sumar desde la educación, la salud comunitaria, el acompañamiento a niños, la promoción del empoderamiento femenino o el desarrollo ambiental. De insertarse en comunidades que enfrentan obstáculos reales cada día y que, sin embargo, siguen abriéndose al mundo con hospitalidad, dignidad y alegría.
En este artículo encontrarás todo lo que necesitas saber para hacer un voluntariado en Cabo Verde y qué tener en cuenta para vivir esta experiencia de la mejor manera. Si buscas conocer el país de forma distinta a la del turismo superficial e involucrarte en su realidad, este artículo es para tí.

¿Cuáles son los beneficios de hacer un voluntariado en Cabo Verde?
Hacer un voluntariado en Cabo Verde es descubrir el verdadero significado de la palabra intercambio. Porque en este rincón del Atlántico, donde el tiempo parece correr más lento y la vida se vive con los pies descalzos, uno no llega a enseñar: llega a aprender y a conocer una cultura muy interesante.
Justamente, uno de los mayores beneficios de esta experiencia es el encuentro con una cultura insular profundamente marcada por la resiliencia. Las comunidades caboverdianas han aprendido a convivir con la escasez de agua, de recursos, de conectividad. Y, sin embargo, nada de eso impide que sus habitantes compartan lo que tienen o que te inviten a un café en la vereda aunque no hablen tu idioma. En ese contexto, el voluntario deja de ser un extranjero para convertirse en un puente.
Además, Cabo Verde te permite vivir una inmersión lingüística y cultural única. Aunque el portugués es el idioma oficial, el kriolu (una lengua criolla nacida del mestizaje africano y europeo) es el que se habla en las casas, en los mercados y en las calles. Aprender a comprenderlo, incluso sin hablarlo, es parte del viaje. Y así también lo es descubrir los ritmos de la música tradicional, las historias orales que pasan de generación en generación o la gastronomía hecha con lo poco que da la tierra y mucho ingenio.
Desde lo personal, la experiencia en Cabo Verde suele convertirse en un punto de inflexión emocional y espiritual. No solo porque aprendes a valorar lo esencial, sino porque te enfrentas a una forma de vida más comunitaria, menos individualista, más conectada con los ciclos de la naturaleza.
También hay una dimensión de crecimiento profesional que no hay que subestimar. Ya sea que participes en programas educativos, sanitarios, sociales o medioambientales, desarrollarás habilidades como la resolución de problemas en entornos escasos, la empatía intercultural, la adaptación constante y la colaboración con equipos diversos. Todo eso suma. Y mucho.
Pero quizás el mayor beneficio sea ese que no se puede medir: el de sentir que fuiste parte. No de un proyecto, ni de una ONG, ni de una agenda. Parte de una comunidad que te deja entrar y te transforma sin avisar.

¿Cuáles son los requisitos para hacer un voluntariado en Cabo Verde?
Viajar a Cabo Verde como voluntario no es complicado, pero requiere organización y compromiso. No se trata solo de reservar un vuelo: es importante entender el contexto del país, sus normas migratorias y las condiciones de vida del lugar donde vas a estar trabajando. Cuanto más claro tengas todo antes de partir, mejor podrás disfrutar la experiencia y poner el foco en lo que realmente importa.
Por eso, antes de pasar a ver los programas y proyectos de voluntariado en Cabo Verde, te detallamos uno por uno los requisitos que tendrás que cumplir para viajar al país. La idea es que puedas comenzar a reunir los documentos necesarios unos meses antes y que llegues a destino con una idea lo más clara posible de qué esperar.
1- Visa y pasaporte para Cabo Verde
Lo primero que tienes que saber es que, para estancias cortas (de hasta 30 días), la mayoría de los países de América Latina y Europa no necesitan visa previa para ingresar a Cabo Verde. Sin embargo, sí es obligatorio registrarse en línea antes del viaje mediante un sistema llamado EASE, pagar una tasa aeroportuaria y presentar el pasaporte con al menos seis meses de validez.
Si tu programa dura más de un mes, es probable que la ONG te ayude a tramitar una prórroga o una visa especial de estancia prolongada. Como sea, asegúrate de consultarlo con anticipación para evitar estar a contrarreloj antes del viaje.
2- EASE (Formulario de Entrada para Cabo Verde)
El Formulario de Entrada para Cabo Verde es un documento obligatorio que tendrás que completar antes de viajar al país. Tal como te contamos en el punto anterior, junto con el pasaporte y la visa (si corresponde) son requisitos migratorios, así que no olvides tenerlo en mente.
El formulario es sencillo y se completa 100% en línea en pocos minutos, idealmente unos cinco días antes de viajar. Es válido exclusivamente para viajeros que ingresan por vía aérea y ayuda a acelerar los trámites en el aeropuerto, de allí la importancia de completarlo antes de viajar. Aplica para todas las personas que provengan de países exentos de visa (como Argentina, España, México, Colombia, entre muchos otros) y requiere el pago de una tasa de seguridad aeroportuaria (TSA), que ronda los €34.
3- Edad mínima
Para hacer un voluntariado también hay requisitos de edad que se deben cumplir. En el caso de Cabo Verde (y muchos otros destinos) la mayoría de las organizaciones exige tener al menos 18 años cumplidos. Algunos programas aceptan voluntarios de 16 o 17 años, pero solo si viajan en grupo o con autorización expresa de sus padres. En cuanto a la edad máxima, no hay un límite, aunque se valora la buena salud. Lo que realmente importa es la motivación, la apertura cultural y la capacidad de adaptarse a entornos diferentes.
4- Requisitos sanitarios para hacer voluntariado en Cabo Verde
A nivel sanitario, no hay vacunas obligatorias para ingresar al país si vienes desde zonas sin fiebre amarilla. No obstante, los centros de medicina del viajero suelen recomendar tener al día la vacuna contra la hepatitis A, fiebre tifoidea, tétanos y, en algunos casos, hepatitis B.
Respecto a la malaria, si bien no es una zona de alto riesgo, puede estar presente en algunas islas rurales, por lo que es importante consultar con profesionales y, si corresponde, llevar repelente o medicación preventiva.
5- Seguro médico internacional
Como para la mayoría de los voluntariados en África, otro requisito clave para viajar a Cabo Verde es contar con un seguro médico internacional que incluya hospitalización, asistencia por accidentes, traslados sanitarios y repatriación. En las islas principales como Santiago, São Vicente o Sal hay clínicas privadas de buena calidad, pero los servicios públicos son limitados y los traslados interinsulares pueden tardar si no cuentas con respaldo logístico. Allí es cuando interviene el seguro para facilitarte la atención médica.
Además, ten presente que muchas ONG exigen presentar la póliza antes de comenzar tu voluntariado e incluso algunas lo incluyen en la cuota del programa.
6- Idioma en Cabo Verde
El portugués es el idioma oficial de Cabo Verde, pero la lengua que escucharás en el día a día es el kriolu, una mezcla de portugués con lenguas africanas. No es obligatorio hablar ninguno de los dos para hacer un voluntariado, aunque tener un nivel básico de portugués (A2 o superior) te facilitará muchísimo la integración con las familias locales y los niños. Algunas organizaciones ofrecen talleres introductorios para ayudarte en este punto.
7- Lleva un plan de datos móviles para Cabo Verde
Por último, no subestimes la necesidad de estar conectado. Si bien en las ciudades principales hay cobertura de internet, en muchas aldeas o zonas rurales el WiFi es intermitente. Para evitar quedarte incomunicado, lo ideal es viajar con un plan mensual de Holafly, que te brindará datos desde el primer minuto, sin necesidad de un chip físico.
Puedes elegir entre 10 GB, 25 GB o datos ilimitados, de acuerdo a tus necesidades, y mantenerte comunicado desde Cabo Verde con tus seres queridos, con tu coordinador y la ONG con la que viajaste, así como usar el traductor, descargar mapas e ir compartiendo tu experiencia de voluntariado en las redes. Cualquiera sea la razón, Holafly hará que tu paso por Cabo Verde transcurra sin inconvenientes.
¿Cuáles son los mejores programas de voluntariado en Cabo Verde?
Si bien Cabo Verde no es (todavía) uno de los destinos más masivos para hacer voluntariado internacional, la oferta de programas está creciendo con fuerza, especialmente en islas como Santiago, São Vicente y Sal. Lo interesante es que, al no estar tan saturado como otros países, acá el voluntariado conserva su esencia más auténtica: se basa en el contacto directo con la comunidad, en la improvisación creativa frente a la escasez y en el aprendizaje mutuo.
A continuación, te compartimos dos opciones de programas de voluntariado en Cabo Verde. Son proyectos reales, activos y con estructuras sólidas que garantizan acompañamiento local y seguridad.
1- Cooperatour – Protección de tortugas marinas en Cabo Verde
¿Sabías que las playas de las islas de Cabo Verde son un sitio de anidación para la tortuga boba? El hábitat de anidación de esta valiosa especie se encuentra constantemente amenazado por los desarrollos inmobiliarios sobre la costa y la depredación de los nidos, produciendo desorientaciones durante el nacimiento de las crías. A ello se suma la captura incidental en la pesca con palangre, el arrastre de camarones y la contaminación, factores que han reducido considerablemente la población de tortugas boba.
Coopertour tiene un programa de voluntariado especialmente diseñado para los amantes de la vida animal que quieran comprometerse con la supervivencia de esta especie. Trabajarás junto con miembros de la comunidad local para garantizar la protección de las tortugas marinas hembras a través de actividades diversas, como patrullar las playas por la noches para disuadir a los cazadores, colaborar con actividades de trabajo de campo (el marcado y medición de tortugas, por ejemplo), la reubicación y excavación de nidos. También podrás sumarte a iniciativas educativas en las escuelas locales, a fin de concientizar a los más pequeños en la importancia de la conservación de la tortuga boba.
Característica | Detalle |
---|---|
Requisitos | No se especifican, pero en general se pide ser mayor de 18 años, tener un nivel básico de portugués o inglés y predisposición a trabajar con animales. |
Duración | Dos semanas como mínimo. |
Incluye | Recogida y traslado desde el Aeropuerto Internacional de Praia. Charlas orientativas sobre Cabo Verde. Alojamiento cerca del proyecto. Tres comidas diarias. Asistencia permanente en destino. Coordinación local. Curso online de cooperación internacional. Certificado de participación en el programa (opcional). |
Precio | €390 por semana + €210 de inscripción. |
Tareas | Cuidado de las tortugas que viven en el centro. Traslado de huevos a un criadero seguro. Mantenimiento de la playa y áreas del proyecto. Alimentación de tortugas. Recolección de huevos de los nidos en la playa. Patrullaje nocturno de la playa para recolectar huevos. Liberar tortugas bebé en el mar. Orientación para turistas. |
2- Adventure Volunteer – Programa de enseñanza en Tarrafal
Si te gustan los niños, este proyecto educativo en Tarrafal puede ser justo lo que estás necesitando. En un contexto donde los recursos son limitados, Adventure Volunteer ofrece un programa que busca garantizar el acceso a una educación básica de calidad a niños y niñas en situación de vulnerabilidad. Tu misión será apoyar al personal docente a la vez que fomentas el aprendizaje, el desarrollo personal y la inclusión social de los niños.
Si lo deseas, podrás incluir el programa deportivo, que está diseñado para fomentar la actividad física, el trabajo en equipo y el desarrollo personal a través del fútbol y el baloncesto en niños de todas las edades y niveles de habilidad.
Característica | Detalle |
---|---|
Requisitos | Tener más de 18 años, disponer de un seguro de viaje, no tener antecedentes penales, mostrar respeto por las culturas y costumbres locales, nivel básico de portugués o español fluido. |
Duración | Dos semanas como mínimo. |
Incluye | Recogida y traslado desde Aeropuerto Internacional de Praia. Guía con información importante sobre el programa. Asistencia del equipo local 24/7. Alojamiento en casa de voluntarios en Tarrafal, cerca del proyecto. Tres comidas diarias. Certificado de semanas realizadas en tu voluntariado. |
Precio | €885 por dos semanas. €315 por cada semana adicional + donación inicial de €150. |
Tareas | Enseñanza de inglés, matemáticas e historia. Actividades de arte y música. Clases de higiene y salud. Manualidades y juegos al aire libre. Preparación de comidas para los niños. Organización de actividades. Tareas administrativas. |
¿Qué tipos de proyectos para hacer voluntariado en Cabo Verde existen?
En Cabo Verde, el voluntariado no se limita a una única causa. Cada isla plantea desafíos diferentes y por eso los tipos de proyectos disponibles se adaptan a los recursos y particularidades de cada lugar. Las oportunidades son variadas, pero todas tienen algo en común: se desarrollan en comunidades donde el acceso a servicios básicos es limitado y donde el acompañamiento cercano puede marcar una gran diferencia.
Más allá del tipo de proyecto que elijas, lo importante es que llegues con una actitud abierta, dispuesto a adaptarte, a observar antes de actuar y a construir desde el respeto. Dicho esto, veamos cuáles son los proyectos de voluntariado en Cabo Verde más comunes:
1- Educación infantil y apoyo escolar
Uno de los ámbitos de voluntariado más frecuentes es la educación infantil y el apoyo escolar, especialmente en barrios periféricos de Praia (capital de la isla de Santiago) o Mindelo (en São Vicente). Allí, los voluntarios se suman a centros comunitarios o bibliotecas locales donde se dictan clases de refuerzo para niños y adolescentes que no logran seguir el ritmo del sistema educativo formal.
A veces, el trabajo consiste en enseñar inglés o matemáticas. Otras veces, en simplemente estar ahí, escuchando y sosteniendo la motivación de chicos que necesitan más contención que teoría. En muchos casos, el hecho de que alguien del exterior se interese por ellos ya es, en sí mismo, un estímulo para el aprendizaje.
2- Proyectos en salud
También hay una fuerte demanda en proyectos de salud y sensibilización comunitaria, en especial en zonas rurales o con difícil acceso a centros médicos. Si bien los voluntarios no médicos no realizan tareas clínicas, sí pueden colaborar en campañas de prevención de enfermedades, promoción de higiene personal, salud sexual y talleres sobre nutrición o cuidado del agua.
Las actividades suelen ser simples pero fundamentales: repartir materiales, traducir explicaciones, acompañar a familias o simplemente difundir información con calidez y claridad.
3- Protección medioambiental
Otro campo muy activo es el de la protección medioambiental, especialmente en islas con fuerte presión turística como Sal o Boa Vista. Allí, las ONG locales impulsan proyectos de reciclaje, recolección de residuos, educación ambiental en escuelas y campañas para reducir el uso de plásticos.
Como voluntario, no solo participarás de estas actividades, sino que muchas veces ayudarás a diseñarlas y a encontrar formas creativas de movilizar a la comunidad. En un país donde el cambio climático ya es tangible (menos lluvias, mayor erosión, más sequías), este tipo de trabajo tiene un impacto directo y urgente.

4- Acompañamiento y empoderamiento de la mujer
El acompañamiento a mujeres y familias en situación de vulnerabilidad también es un eje central. En muchas comunidades, especialmente rurales, las mujeres no han accedido a una formación profesional y tienen a su cargo varios hijos.
Los proyectos de empoderamiento incluyen desde talleres de costura o cocina hasta actividades de alfabetización, formación en derechos o pequeñas iniciativas de microemprendimientos. Los voluntarios actúan como facilitadores, pero también como referentes que escuchan, motivan y comparten herramientas. En estos espacios, los vínculos suelen ser muy íntimos y transformadores para ambas partes.
5- Proyectos combinados
Finalmente, existen proyectos que combinan varias áreas, como los centros de día donde se mezclan tareas educativas, recreativas, alimentarias y de acompañamiento afectivo. Estos espacios, presentes sobre todo en Santiago y São Nicolau, permiten involucrarse de forma más transversal y conocer la vida cotidiana de la comunidad desde dentro.
¿Cuánto cuesta hacer un voluntariado en Cabo Verde?
A diferencia de un viaje tradicional, donde eliges un destino, reservas alojamientos y organizas excursiones por cuenta propia, el voluntariado implica una estructura previa que cubre buena parte de la logística diaria. Eso sí: aunque se trate de un viaje solidario, no es gratuito. Participar en un programa serio, seguro y bien gestionado requiere una inversión. La buena noticia es que, a cambio, se accede a una experiencia cultural profunda, a vínculos reales con la comunidad y a un día a día con todo resuelto.
A continuación, te contamos cuáles son los principales costos que deberías contemplar al hacer un voluntariado en Cabo Verde, de modo que puedas organizar tu presupuesto sin sorpresas.
1- Costos obligatorios de los programas
La mayoría de las organizaciones que operan en Cabo Verde establecen una tarifa semanal o mensual, que incluye alojamiento, comidas, soporte local, materiales para las actividades y, en algunos casos, traslados internos o una orientación inicial. Los precios varían según el proyecto, la isla y la duración, pero como referencia general, puedes esperar algo así:
- Dos semanas: entre €470 y €570
- Un mes: entre €780 y €960
- Dos meses: desde €1.300
A esto se suma el pasaje aéreo internacional, que suele rondar entre los €700-1.050 ida y vuelta, dependiendo del país de origen y la época del año. Ten en cuenta que no hay vuelos directos desde América Latina, por lo que tendrás que hacer al menos una escala en Europa (Lisboa o Madrid son las más frecuentes).
También deberás pagar la tasa EASE, un registro electrónico obligatorio que reemplaza la visa en estancias cortas. Se gestiona online y cuesta unos €34. Si tu programa dura más de 30 días, la ONG te indicará cómo renovar tu estatus migratorio.
Por último, es indispensable contratar un seguro médico internacional, que cubra atención hospitalaria, traslados de emergencia y repatriación. Muchas ONG lo exigen como condición para participar. El costo aproximado es de €35-50 por mes, dependiendo de la cobertura.
2- Costos variables
Una vez en destino, tus gastos dependerán de dónde estés alojado, cuánto te muevas y qué tipo de vida lleves. Por ejemplo, si estás en una isla turística como Sal, es probable que quieras salir a explorar, comer afuera o hacer alguna excursión. Si estás en un pueblo rural de Santiago, en cambio, tus gastos personales van a ser mínimos porque tendrás todo cubierto y poco margen para consumir.
Un estimado razonable para cubrir transporte local, recargas de celular, compras personales o alguna salida ocasional ronda los €70-130 por mes.
3- Lo que ahorrarás al hacer un voluntariado en Cabo Verde
Uno de los grandes beneficios del voluntariado es que te evita muchos de los costos típicos del turismo tradicional. No tendrás que pagar alojamiento por noche, ni buscar dónde comer todos los días, ni gastar en tours organizados. En la mayoría de los programas, el alojamiento y entre dos y tres comidas diarias están incluidos, lo que representa un ahorro mensual de entre €260 y €430, dependiendo del destino.
Además, al formar parte de una comunidad local, accedes a experiencias culturales gratuitas o simbólicas: clases de danza, encuentros comunitarios, excursiones grupales, caminatas por las islas o días de playa con niños y vecinos. También te ahorras traslados innecesarios porque vives cerca del lugar donde colaboras.
Y quizás lo más importante: al evitar el circuito turístico, te llevas un viaje con sentido, donde el impacto es recíproco y real. Lo que inviertes económicamente se traduce en una experiencia mucho más rica y auténtica.
Voluntariado en Cabo Verde: preguntas frecuentes
Sí, aunque tener un nivel básico hará que tu experiencia fluya de mejor manera. El portugués es el idioma oficial, pero en la vida cotidiana se habla kriolu, una lengua criolla que puede resultar difícil al principio. Muchas ONG aceptan voluntarios que hablen inglés o español, pero cuanto más puedas comunicarte con la comunidad, más enriquecedora será la experiencia. Algunas organizaciones ofrecen clases introductorias al idioma al llegar.
Totalmente. La mayoría de los programas tiene días libres o media jornada, lo que permite a los voluntarios recorrer las islas, hacer caminatas, visitar playas o conocer otros pueblos. También podrás organizar unas vacaciones al final del programa, ya con un conocimiento más profundo del país. De hecho, muchos voluntarios eligen quedarse unos días extra para conocer islas como Sal o Fogo por su cuenta.
Ropa cómoda, transpirable y sobria. En zonas rurales, especialmente en Santiago, se espera una vestimenta respetuosa, sin prendas demasiado cortas o escotadas. Si vas a colaborar en centros educativos o con niños, evita remeras con frases o imágenes polémicas. También es recomendable llevar sandalias resistentes, una gorra, protector solar y un impermeable liviano para los días de lluvia.
En algunas islas o pueblos pequeños, es habitual que haya cortes de energía breves o interrupciones del suministro de agua. No es algo constante, pero puede pasar. Por eso es clave ir con una actitud flexible y llevar lo esencial. Una linterna, batería externa para el celular, una botella reutilizable y toallitas húmedas pueden ser grandes aliados en esos momentos.
Su identidad insular, su mezcla cultural afroportuguesa, su clima más templado y su relativa estabilidad política lo convierten en un destino ideal para quienes buscan una experiencia africana fuera del circuito clásico. Aquí no encontrarás safaris ni grandes ciudades, pero sí paisajes volcánicos, comunidades pequeñas y una hospitalidad que se te queda grabada.