¿Cómo lograr estudiar y trabajar en el extranjero?
¿Sueñas con hacer las maletas para irte a estudiar y trabajar en el extranjero? Te contamos todo lo que necesitas saber antes de partir.
Si hablas con alguien que un día decidió arriesgarse y hacer las maletas para estudiar y trabajar en el extranjero, lo más seguro es que te cuente que fue una de las mejores experiencias de su vida. Hacerlo, no es solo asistir a clases en universidades prestigiosas o aprender nuevos idiomas mientras te costeas la estancia, es una experiencia que cambia por completo la forma en la que ves el mundo. Por si eso no fuera suficiente, te abre oportunidades laborales muy interesantes.
Eso sí, aunque la idea suena irresistible, llevarla a cabo no siempre es sencillo. Existen permisos que debes tramitar, decisiones que tomar y oportunidades que identificar para que todo salga bien. Por eso, hemos querido preparar esta guía. En ella te contaremos, paso a paso, cómo lograr estudiar y trabajar en el extranjero en 2025. Haremos un repaso por los mejores países para lanzarse a la aventura, opciones de estudio y programas que pueden ayudarte a alcanzar tu objetivo. ¿Listo para empezar a planificar tu aventura internacional?
¿Por qué estudiar y trabajar en el extranjero?
Estudiar y trabajar en el extranjero es una oportunidad única para crecer tanto a nivel personal como profesional. Aprenderás en entornos académicos diferentes, perfeccionarás otro idioma y obtendrás experiencia laboral que marcará la diferencia en tu futuro. Además, te enfrentarás a desafíos que te ayudarán a salir de tu zona de confort y a desarrollar habilidades que no podrías adquirir de otra manera.
La ventaja más clara es la competitividad que ganarás al regresar. Las empresas valoran cada vez más a los profesionales que han estudiado y trabajado fuera, gracias a su capacidad de adaptación, sus conocimientos multiculturales y la experiencia internacional que aportan. Pero hay más: mientras trabajas para cubrir tus gastos, también podrás viajar, descubrir nuevas culturas y ampliar tu red de contactos por el mundo. Una combinación, como decíamos, que transformará tu forma de ver las cosas.
Permisos para estudiar y trabajar en el extranjero
Antes de hacer las maletas, es importante entender qué permisos necesitas para estudiar y trabajar en el extranjero. Dependiendo del país al que quieras ir y del tiempo que planees quedarte, deberás solicitar un permiso de estudio, uno de trabajo o una combinación de ambos. Cada tipo tiene requisitos específicos que deberás cumplir, así que conocer las opciones desde el principio te evitará contratiempos.
Hagamos un repaso por los permisos más comunes que suelen ser necesarios para estudiar y trabajar en el extranjero, cómo funcionan y qué debes hacer para obtenerlos. Así, podrás centrarte en lo que realmente importa: estudiar, trabajar y disfrutar de la experiencia.
1. Permiso de estudio
El permiso de estudio, conocido también como visa de estudiante, es el documento imprescindible para formarte en el extranjero de manera legal. No importa si vas a cursar un grado universitario, un máster o un curso de idiomas, este permiso te permite residir en el país durante el tiempo que dure tu formación. ¿Se lo dan a cualquiera? No. En muchos casos, no basta con estar matriculado: deberás demostrar que cuentas con los recursos económicos para sostenerte y, en algunos destinos, contratar un seguro médico obligatorio.
Además, hay países que permiten prórrogas si decides continuar tus estudios o aplicar a programas superiores. Solicitarlo no es complicado si conoces los pasos correctos.
- ¿Quién puede solicitarlo? Personas aceptadas en un programa académico en una institución reconocida del país.
- Requisitos principales:
- Carta de aceptación de la universidad, instituto o escuela.
- Demostrar fondos suficientes para costear estudios y manutención.
- Seguro médico que cubra toda la estancia.
- Pasaporte válido.
- Duración: suele abarcar la duración del programa académico, aunque algunos países permiten prórrogas.
¿Cómo se obtiene?
- Solicita el permiso en el consulado o embajada del país al que te diriges. En muchos casos, el proceso se puede iniciar online.
- Presenta los documentos requeridos y paga las tasas correspondientes.
- Una vez aprobado, recibirás tu visado de estudiante.
Coste estimado:
El precio del permiso de estudio varía según el país. Algunos ejemplos aproximados:
- Australia: la tasa es de 1.600 dólares australianos (1.040 dólares estadounidenses).
- Canadá: la tasa de la visa de estudiante en Canadá es de 150 dólares canadienses (110 dólares estadounidenses).
- Reino Unido: la tasa de la visa de estudiante en Reino Unido es de 490 libras esterlinas (620 dólares estadounidenses).
2. Permiso de trabajo para estudiantes
Estudiar y trabajar al mismo tiempo es posible, pero solo si cuentas con el permiso adecuado. Este visado complementario al de estudiante es la solución para quienes necesitan generar ingresos o ganar experiencia profesional mientras completan su formación académica. En la mayoría de los países, permite trabajar a tiempo parcial durante las clases y a tiempo completo en vacaciones.
El modo en que funciona varía según el destino. Algunos países incluyen este permiso de forma automática con la visa de estudio y otros exigen trámites adicionales.
- ¿Quién puede solicitarlo? Estudiantes extranjeros con un visado de estudios vigente.
- Requisitos principales:
- Inscripción en un programa académico a tiempo completo.
- Cumplir con un límite de horas laborales por semana (generalmente entre 15 y 20 horas).
- Aprobación previa de la institución educativa en algunos países.
- Duración: coincide con la vigencia del visado de estudiante.
¿Cómo se obtiene?
- En algunos países, el permiso de trabajo va incluido al obtener el visado de estudiante.
- En otros casos, deberás presentar una solicitud adicional en el servicio de inmigración del país.
Coste estimado:
Tendrás que consultar las tasas del país al que quieres mudarte. Veamos la cantidad a pagar en los países del ejemplo anterior:
- Australia: entre 600 y 700 dólares australianos (390 a 450 dólares estadounidenses).
- Reino Unido: suele estar incluido en la visa Tier 4.
- Canadá: no tiene coste adicional si está vinculado al visado de estudio.
3. Visado de trabajo post-estudio
La visa de trabajo post-estudio es la opción perfecta para quienes no quieren despedirse del país una vez terminada su formación. Te permite quedarte y trabajar a tiempo completo. Es especialmente interesante en países que buscan retener el talento internacional, como Australia, Canadá o Alemania.
Algunos países exigen contar con una oferta de empleo para aprobar la solicitud. Otros, se centran más en el éxito académico y los recursos económicos disponibles.
- ¿Quién puede solicitarlo? Graduados de programas académicos reconocidos en el país de destino.
- Requisitos principales:
- Haber completado con éxito tu formación académica.
- Demostrar fondos suficientes para tu manutención inicial.
- Contar con una oferta de trabajo en algunos casos.
- Duración: depende del país; puede ir de 6 meses a varios años.
¿Cómo se obtiene?
- Presenta tu solicitud en el servicio de inmigración del país donde estudiaste.
- Aporta tu certificado académico, prueba de fondos y otros documentos solicitados.
4. Permiso de trabajo con voluntariados o programas especiales
Si tu objetivo no es solo estudiar o trabajar, sino vivir una experiencia más enriquecedora, el permiso de trabajo vinculado a voluntariados o programas especiales puede ser lo que necesitas. Estos permisos están diseñados para estudiantes que participan en proyectos de intercambio cultural, prácticas profesionales o colaboraciones en organizaciones sin ánimo de lucro.
Lo interesante de esta opción es su flexibilidad. A menudo, las horas de trabajo permitidas son más amplias y se combinan con actividades de formación. Es una excelente alternativa si buscas desarrollar habilidades nuevas mientras contribuyes a una causa o te integras de lleno en la cultura local.
¿Quién puede solicitarlo? Personas inscritas en programas de voluntariado, intercambios o prácticas.
- Requisitos principales:
- Carta de invitación o aceptación por parte de la organización.
- Demostrar fondos suficientes.
- Seguro médico válido.
- Duración: limitada al tiempo que dure el programa o actividad.
¿Cómo se obtiene?
- Solicita el permiso en el consulado o embajada correspondiente, presentando los documentos requeridos.
Opciones para estudiar y trabajar en el extranjero
¿Tienes claro que quieres formarte y trabajar fuera pero no sabes por dónde empezar? En ese caso, te gustará saber que hay muchas alternativas por las que optar. La clave está en elegir bien el programa que se adapte a tus metas y circunstancias. Tal vez prefieres la estructura de un intercambio académico, la libertad de un voluntariado o la estabilidad de una carrera universitaria que te permita trabajar a la vez. Cada opción tiene sus ventajas y requisitos.
Explorar estas alternativas no solo te abrirá puertas en el ámbito profesional, también te permitirá sumergirte en una nueva cultura, desarrollar habilidades que no se enseñan en un aula y ganar independencia. Vamos a revisar las opciones más comunes para combinar estudios y trabajo en el extranjero, para que encuentres la que mejor encaje contigo.
1. Intercambios académicos
Los intercambios académicos son una de las maneras más accesibles de estudiar en el extranjero. Permiten a estudiantes universitarios completar parte de su formación en una institución fuera de su país, gracias a acuerdos entre universidades. Lo más atractivo es que, en muchos casos, seguirás pagando solo las tasas de tu universidad de origen, lo que reduce bastante los gastos.
Algunos, como Erasmus+ (un programa de becas para estudiar en España y otros países europeos) o los acuerdos bilaterales entre universidades, permiten también combinar estudios con trabajo a tiempo parcial. Además, esta experiencia suele estar muy valorada en el ámbito profesional, pues demuestra tu capacidad de adaptación y tus competencias interculturales.
2. Solicitar becas
Las becas son una opción excelente si quieres estudiar en el extranjero sin preocuparte tanto por los gastos. Muchas instituciones educativas, organizaciones gubernamentales y fundaciones privadas ofrecen ayudas económicas que cubren la matrícula, los gastos del día a día o ambos. Esto facilita el acceso a universidades de prestigio y programas académicos de calidad.
Además de aliviar el aspecto financiero, algunas becas permiten trabajar a tiempo parcial como parte de sus condiciones. Existen becas generales, como las becas para estudiar en Estados Unidos Fulbright o las Chevening en Reino Unido. Pero también otras específicas para estudios técnicos o profesionales. Investigar y solicitar estas ayudas puede ser tu oportunidad para cumplir el sueño de estudiar y trabajar en otro país.
3. Voluntariados
El voluntariado en el extranjero es una oportunidad perfecta para quienes buscan algo más que una experiencia académica. Estos programas te permiten colaborar con organizaciones no gubernamentales, proyectos comunitarios o iniciativas culturales, al tiempo que adquieres habilidades prácticas y personales. Algunos países incluso permiten trabajar de manera remunerada mientras participas en un programa de voluntariado.
Además, este tipo de experiencia suele incluir beneficios como alojamiento y manutención. Es una excelente forma de desarrollarte, conocer una cultura diferente y, al mismo tiempo, aportar tu granito de arena a una causa en la que crees.
4. Cursos
Si prefieres algo más flexible y de menor duración, los cursos son una opción ideal para estudiar en el extranjero mientras trabajas. Estos programas incluyen cursos de idiomas, formación técnica o profesional y talleres especializados. Muchos países permiten trabajar a tiempo parcial si el curso tiene una duración mínima (por lo general superior a seis meses) y estás matriculado en una institución acreditada.
Lo mejor de esta opción es que puedes elegir programas que se ajusten a tus necesidades y al tiempo del que dispones. Por ejemplo, un curso de idiomas te permitirá mejorar tus habilidades de comunicación mientras trabajas y un curso técnico puede darte acceso a trabajos en sectores demandados en el país de destino.
5. Carreras universitarias
Cursar una carrera universitaria en el extranjero es una inversión en tu futuro académico y profesional. Muchas universidades en países como Canadá, Australia o Alemania permiten a los estudiantes internacionales trabajar a tiempo parcial mientras estudian. Además, algunas carreras, como ingeniería, enfermería o tecnología, cuentan con programas prácticos que facilitan la inserción en el mercado laboral.
Estudiar una carrera completa en otro país no solo amplía tus conocimientos, también te abre la puerta a oportunidades profesionales universales. Una vez graduado, podrías acceder a visados de trabajo post-estudio y quedarte más tiempo en el país para desarrollarte profesionalmente.
Mejores países para estudiar y trabajar en el extranjero
Decidir dónde estudiar y trabajar en el extranjero no es una tarea sencilla. El país que elijas no solo influirá en tu formación académica, también determinará las oportunidades laborales a las que podrás acceder, el estilo de vida que disfrutarás y la experiencia cultural que te llevarás contigo. Algunos destinos ofrecen universidades de primer nivel; otros, mercados laborales abiertos para estudiantes internacionales que buscan financiar sus estudios o iniciar su carrera profesional.
¿Buscas un entorno multicultural como el de Canadá? ¿Te atrae la posibilidad de acceder a matrículas asequibles en Alemania? Cada país tiene algo que lo hace especial y puede marcar la diferencia en tu camino académico y profesional. Vamos a repasar los destinos más destacados y lo que ofrecen para que tomes una decisión con toda la información en la mano y elijas el lugar que mejor se adapte a tus objetivos.
Australia: estudia en universidades top y trabaja a tiempo parcial
Es uno de los destinos más populares entre estudiantes internacionales. Sus universidades están entre las mejores del mundo, con instituciones como la Universidad de Melbourne o la Universidad Nacional Australiana (ANU). Además, la política que aplica en sus visas de estudiante Australia, facilita trabajar a tiempo parcial mientras te formas.
Lo que hace a Australia un destino ideal:
- Trabajo legal mientras estudias: puedes trabajar hasta 20 horas semanales durante el período lectivo y tiempo completo en vacaciones.
- Oportunidades post-estudio: el visado post-estudio permite quedarte y trabajar a tiempo completo después de graduarte.
- Sectores con demanda de estudiantes: hostelería, turismo, servicios y agricultura.
- Calidad de vida: ciudades como Sídney y Melbourne combinan un ambiente cosmopolita con una gran oferta cultural.
Canadá
Canadá combina un sistema educativo de alta calidad con un entorno acogedor para estudiantes extranjeros. Universidades como la de Toronto o la McGill tienen un gran prestigio internacional.
Por qué deberías considerar Canadá:
- Trabajo durante los estudios: puedes trabajar hasta 20 horas semanales y tiempo completo en vacaciones.
- Visados post-estudio: permite quedarte en el país y acceder al mercado laboral.
- Sectores con mayor demanda: tecnología, salud, ingeniería y servicios.
- Entorno multicultural: ciudades como Toronto y Vancouver son conocidas por su diversidad y calidad de vida.
Alemania: matrículas baratas y acceso a trabajos técnicos
Alemania es uno de los países más accesibles para estudiar y trabajar en el extranjero. Lo es gracias a sus universidades públicas, que tienen matrículas muy bajas o incluso gratuitas para estudiantes internacionales. Además, permite combinar estudios con trabajos a tiempo parcial, facilitando la financiación de tu estancia.
Ventajas de estudiar y trabajar en Alemania:
- Acceso económico a la educación: matrículas reducidas en universidades públicas.
- Trabajo a tiempo parcial: puedes trabajar mientras estudias, lo que facilita cubrir tus gastos de vida.
- Sectores en auge: ingeniería, tecnología y ciencias.
- Perspectivas post-estudio: visas específicas permiten quedarse y trabajar después de graduarse.
Reino Unido: prestigio académico y oportunidades laborales
El Reino Unido es otro destino de referencia para estudiar y trabajar en el extranjero. Algunas de sus universidades, como Oxford, Cambridge o el Imperial College London, figuran entre las mejores del mundo y ofrecen programas adaptados a las necesidades del mercado laboral internacional.
Lo que hace especial al Reino Unido para estudiar y trabajar desde allí:
- Trabajo flexible para estudiantes: puedes trabajar 20 horas semanales durante el curso y a tiempo completo en vacaciones.
- Visado post-estudio: te permite quedarte hasta dos años después de graduarte para buscar trabajo.
- Sectores con más oportunidades: finanzas, tecnología, negocios y educación.
- Acceso global: una red internacional de contactos y empresas con presencia global.
Nueva Zelanda: educación innovadora y naturaleza única
Nueva Zelanda se ha ganado un lugar entre los destinos favoritos por sus paisajes únicos y su calidad educativa. Sus universidades ofrecen programas innovadores y prácticas profesionales, con la posibilidad de trabajar mientras estudias.
Razones para elegir Nueva Zelanda:
- Trabajo mientras estudias: puedes trabajar 20 horas semanales y a tiempo completo en vacaciones.
- Visados post-estudio: facilitan quedarse y ganar experiencia profesional.
- Sectores con demanda: turismo, agricultura y tecnología.
- Vida tranquila y segura: ciudades como Auckland y Wellington ofrecen un equilibrio perfecto entre estudio y bienestar.
Irlanda: tecnología y negocios en un entorno dinámico
Irlanda es un destino cada vez más popular entre estudiantes internacionales. Sus universidades y colegios técnicos ofrecen programas de alta calidad en áreas como tecnología, negocios y humanidades. Además, el país cuenta con políticas que permiten a los estudiantes trabajar mientras completan sus estudios.
Lo más destacado de Irlanda:
- Trabajo para estudiantes: permite trabajar 20 horas semanales durante el curso y tiempo completo en vacaciones.
- Industria tecnológica y farmacéutica: sede de grandes multinacionales y startups innovadoras.
- Programas académicos enfocados al empleo: universidades y colegios técnicos con formación práctica.
- Calidad de vida: ciudades como Dublín ofrecen un entorno profesional dinámico con un ritmo de vida accesible.
Agencias para trabajar y estudiar en el extranjero
Estudiar y trabajar en otro país es una experiencia emocionante, pero no siempre resulta sencillo organizar todo por tu cuenta. Encontrar el programa académico adecuado, tramitar la visa o permisos, buscar alojamiento y conseguir trabajos compatibles con tus estudios puede ser un proceso muy duro. Si no sabes dónde acudir en cada paso, se te hará muy cuesta arriba. Por suerte, hay empresas especializadas en facilitar estas tareas a los estudiantes/trabajadores. Su misión es facilitar el proceso y acompañarte en cada paso.
Actúan como intermediarias entre tú, las instituciones educativas y las autoridades del país de destino. Ofrecen asesoría personalizada para ayudarte a elegir programas que se ajusten a tus intereses y objetivos. También se ocupan de los trámites burocráticos. Te orientarán sobre cómo conseguir la visa adecuada, gestionarán las solicitudes y se asegurarán de que cumplas con todos los requisitos legales. Algunas, incluso, colaboran con universidades o empresas locales y esto les permite ofrecer oportunidades laborales exclusivas.
Una de las grandes ventajas de contar con una agencia es el tiempo que ahorras. Evitas perder horas buscando información dispersa o resolviendo dudas sobre trámites complejos. Además, contar con el apoyo de profesionales con experiencia reduce las probabilidades de errores y retrasos. También ofrecen servicios adicionales, como la búsqueda de alojamiento, seguros médicos internacionales obligatorios o planes financieros adaptados a tus necesidades.
Por supuesto, estos servicios tienen un coste. Las tarifas varían según el país, la complejidad del trámite y los servicios contratados. Desde asesorías básicas por unos 300 dólares hasta paquetes completos que pueden superar los 1.000, dependiendo del destino y el nivel de soporte.
Consejos para estudiar y trabajar en el extranjero
Combinar estudios y trabajo en otro país es una oportunidad única, pero también puede convertirse en una pesadilla si no organizas bien tu tiempo y recursos. Entre cumplir con los requisitos legales, aprovechar las oportunidades laborales y adaptarte a un entorno desconocido, es fácil sentirse abrumado. La clave está en planificar con cabeza y contar con las herramientas adecuadas para sacar el máximo partido a la experiencia.
¿Necesitas algunos trucos? Estos tips te ayudarán a afrontar cada etapa con mayor seguridad y a evitar errores comunes que podrían complicar tu aventura académica y profesional.
1. Gestiona bien tu tiempo entre estudio y trabajo
Aprender a distribuir tu tiempo es fundamental. Establece horarios realistas que te permitan cumplir con tus estudios sin dejar de lado el trabajo. Prioriza las tareas más importantes. Algunas herramientas, como calendarios digitales o aplicaciones de productividad, pueden ayudarte a organizar tus días.
2. Tramita tus visas y permisos con antelación
Investiga las visas y permisos que vas a necesitar para residir en tu país de destino. Los procesos pueden llevar semanas o incluso meses, solicita todo lo antes que puedas. Asegúrate de cumplir con todos los requisitos para evitar retrasos.
3. Aprovecha las becas disponibles
Buscar becas puede ser la solución para financiar tus estudios. Universidades, organizaciones internacionales y gobiernos ofrecen programas de ayuda económica que cubren matrículas, alojamiento o manutención. Investiga opciones y postúlate a varias para aumentar tus posibilidades.
4. Participa en programas de voluntariado
El voluntariado no solo te permite contribuir a una causa, también es una excelente forma de ganar experiencia, desarrollar nuevas habilidades y crear contactos valiosos. Algunos programas incluso ofrecen alojamiento y manutención a cambio de tu trabajo.
5. Opta por intercambios académicos
Los intercambios académicos son una forma flexible y accesible de estudiar en otro país. Muchos incluyen programas de trabajo parcial que te permiten generar ingresos mientras cursas tus estudios. Consulta con tu universidad si existe algún convenio vigente.
6. Confía en agencias especializadas
Si no quieres encargarte de todo el proceso solo, las agencias especializadas pueden ser de gran ayuda. Te guiarán en los trámites, resolverán dudas y te ofrecerán soluciones adaptadas a tus necesidades, desde visados hasta alojamiento. Recuerda contratar tu eSIM de Holafly para poder preguntarles dudas cuando no abandones tu país.
7. Elige bien tu país de destino
Elige un país que ofrezca buenas oportunidades educativas y laborales. Ten en cuenta factores como el coste de vida, las políticas de trabajo para estudiantes, el idioma y la calidad de las instituciones académicas. Un destino adecuado hará que tu experiencia sea mucho más enriquecedora.
Preguntas frecuentes sobre estudiar y trabajar en el extranjero
¿Qué idioma se necesita para estudiar y trabajar en el extranjero?
Dependerá del país al que viajes. En la mayoría de los casos, necesitarás demostrar tu dominio del idioma oficial a través de pruebas como el IELTS, TOEFL o exámenes similares. Si el destino ofrece programas en inglés, es probable que este sea suficiente. En otros países, tener conocimientos del idioma local te abrirá más puertas tanto en la universidad como en el trabajo.
¿Es obligatoria una visa para estudiar y trabajar?
Sí. La mayoría de los países requieren una visa de estudiante para cursar estudios. Si planeas trabajar, deberás comprobar si tu permiso de residencia permite realizar actividades laborales o si necesitas solicitar un permiso adicional. Revisa siempre las políticas de inmigración del país al que te diriges.
¿Cuántas horas puede trabajar un estudiante extranjero?
El límite varía según el país. Por ejemplo, la visas de estudiante de España, Australia y Canadá, permiten 20 horas semanales durante el período lectivo y tiempo completo en vacaciones. En otros países, las restricciones pueden ser más flexibles o específicas según el tipo de trabajo y visado.
¿Qué trabajos suelen conseguir los estudiantes en el extranjero?
Los trabajos más comunes son en sectores como hostelería, comercio, atención al cliente y servicios. También puedes encontrar oportunidades relacionadas con tu área de estudios, en especial si realizas prácticas o programas de intercambio profesional.
¿Cómo puedo financiar mi experiencia académica?
Existen diferentes formas de financiar tus estudios en el extranjero: becas académicas, programas de intercambio, voluntariados y trabajos a tiempo parcial. Además, algunas universidades y gobiernos ofrecen opciones de ayuda económica para estudiantes internacionales.
¿Es posible quedarse en el país después de graduarme?
Sí, en muchos casos. Algunos países como Australia, Canadá o el Reino Unido ofrecen visados post-estudio que permiten a los graduados trabajar a tiempo completo durante un período determinado. Es una excelente oportunidad para adquirir experiencia profesional y decidir si quieres establecerte a largo plazo.