Noruega o España: ¿dónde se pagan menos impuestos?
Averigua cuáles son los impuestos de Noruega vs. España, y entérate dónde es mejor tributar si tu plan es vivir en alguno de estos países.
¿Estás planeando vivir en Noruega o España? Detente un momento para conocer los impuestos a los que deberás responder una vez que establezcas tu residencia fiscal. En Holafly comparamos los impuestos Noruega vs. España para ayudarte a que veas el panorama claro en cuanto a los diversos regímenes impositivos, características del sistema, tipos de impuestos, tasas fijas y variables, y dónde es mejor tributar.
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¿Cómo funciona el sistema de impuestos en Noruega vs. España?
Noruega tiene un coste de vida alto, así como sus tasas fiscales. No obstante, se perfila como un buen destino para vivir y trabajar por la excelente calidad de vida y el estupendo funcionamiento de los servicios y sistemas locales además de una economía totalmente estable con el mayor fondo monetario a nivel mundial.
España, por su parte, es uno de los países más visitados del mundo, con el turismo como principal carta de su solvencia económica. Pese a esto, su sistema fiscal y funcionamiento de trámites burocráticos hacen de este destino un poco más complicado para tributar y vivir.
El sistema tributario en Noruega vs. España presenta diferencias significativas en cuanto a la facilidad de los trámites y las declaraciones fiscales, influenciadas por la digitalización, la burocracia y la claridad de las normativas. Acompáñanos a analizar ambos sistemas:
Noruega: un sistema altamente digitalizado y simplificado
El sistema tributario noruego está digitalizado por completo. La mayoría de las declaraciones fiscales se realizan a través de la plataforma en línea de la Agencia Tributaria Noruega (Skatteetaten).
Los datos fiscales de las empresas o personas físicas (ingresos, impuestos retenidos, intereses bancarios, etc.) se rellenan automáticamente en las declaraciones, lo que reduce errores y ahorra tiempo.
Las guías fiscales y el soporte al contribuyente están disponibles en varios idiomas, por si eres extranjero tributando en ese país y el proceso y las leyes fiscales son bastante claros.
España: mayor burocracia y complejidad
El sistema tributario español se caracteriza por ser más burocrático debido a la descentralización fiscal.
Las comunidades autónomas establecen diferentes tasas y deducciones en el Impuesto sobre la Renta (IRPF) y otros tributos, lo que significa que las normativas por localidad cambian y los contribuyentes deben regirse por las normas regionales y nacionales, lo que puede generar confusión y complicaciones en el proceso.
También cuenta con plataformas digitales como la Agencia Tributaria (AEAT), pero el sistema no está automatizado del todo y los procesos de revisión pueden ser más tardíos.
Aspecto | Noruega | España |
Plataforma digital | Completamente automatizada y fácil de usar. | Funcional, pero con menor automatización. |
Soporte al contribuyente | Accesible y claro, disponible en varios idiomas. | Dependencia de asesores para mayor claridad. |
Descentralización | Centralizada, con reglas claras. | Descentralizada y variable. |
Tiempo de cumplimiento | Bajo, gracias a la digitalización. | Mayor, debido a la complejidad del sistema. |
Impuestos para empresas o personas jurídicas Noruega vs. España
1. Impuesto sobre sociedades
Noruega:
- Tasa fija del 22% sobre los beneficios netos de la empresa.
- Las empresas dedicadas a la extracción de recursos naturales (como petróleo y gas) pagan impuestos adicionales, con tasas efectivas más altas que pueden superar el 78% por la importancia estratégica de estas actividades en el país.
- Noruega fomenta la inversión en tecnología e innovación, ofreciendo incentivos fiscales para empresas en sectores sostenibles.
España:
- Tasa general del 25%, con un tipo reducido del 15% durante los dos primeros años de actividad para nuevas empresas.
- Existen deducciones fiscales por actividades de I+D+i (Investigación, Desarrollo e Innovación) y por inversiones en energías renovables y transformación digital.
- En regiones específicas, como Cádiz o Barcelona, las empresas pueden operar con exenciones de IVA y aranceles aduaneros.
2. IVA (Impuesto sobre el Valor Añadido)
Noruega:
- Tasa estándar del 25% aplicable a la mayoría de los bienes y servicios.
- Tasa reducida del 15% para alimentos y del 12% para transporte, servicios culturales y turismo.
- Las exportaciones están exentas de IVA.
España:
- Tasa estándar del 21%, con tasas reducidas del 10% para productos como alimentos y turismo, y un 4% para bienes de primera necesidad como medicamentos.
- Las empresas exportadoras pueden acogerse a exenciones de IVA para impulsar el comercio internacional
3. Contribuciones a la seguridad social
Noruega:
- Los empleadores contribuyen con un 14,1% sobre los salarios brutos.
- Con estas contribuciones se abarcan beneficios sociales como licencias parentales generosas, pensiones públicas y un sistema de salud universal.
España:
- Las contribuciones empresariales varían entre el 29,9% y el 31,9%, dependiendo del sector y tipo de contrato laboral.
- Estas tasas se invierten en prestaciones como la Seguridad Social, el desempleo y las bajas laborales.
4. Impuestos locales y específicos
Noruega:
- Los municipios pueden imponer impuestos locales sobre propiedades y terrenos, con tasas que varían según la ubicación y el valor del bien.
- No existe un impuesto sobre el patrimonio para empresas.
España:
- Impuesto sobre Actividades Económicas (IAE): aplica a empresas con un que facturan más de un millón de euros.
- Impuesto sobre el patrimonio: algunas regiones pueden aplicarlo a actividades específicas realizadas por empresas.
5. Impuestos sobre dividendos y ganancias patrimoniales
Noruega:
- Los dividendos distribuidos están sujetos a una retención fiscal del 22%, aunque los inversores extranjeros pueden beneficiarse de tratados internacionales para evitar la doble imposición.
España:
- Las tasas sobre los dividendos y ganancias de capital oscilan entre el 19% y el 26%, según el importe total.
- España cuenta con acuerdos fiscales bilaterales para evitar la doble imposición.
El pago de los impuestos en Noruega destaca por un sistema más simplificado con tasas fijas y pocos impuestos adicionales, pero con altas contribuciones en sectores estratégicos como el petróleo.
España, en cambio, ofrece más incentivos fiscales para startups y pequeñas empresas, aunque con una carga social más alta para los empleadores. La elección entre ambos países depende del sector y las necesidades específicas de la empresa.
¿Dónde es mejor tributar como persona jurídica?
Noruega suele ofrecer un sistema más competitivo para empresas tradicionales, mientras que España es más favorable para startups y pequeñas empresas debido a sus incentivos fiscales iniciales.
Razones para elegir Noruega
- Simplicidad del sistema fiscal: Noruega tiene tasas fijas y procesos tributarios claros.
- Incentivos a la sostenibilidad y tecnología: empresas relacionadas con energía renovable y tecnología pueden acceder a beneficios fiscales competitivos.
- Estabilidad económica: Noruega ofrece un entorno fiscal predecible, ideal para empresas que buscan operar a largo plazo.
Razones para elegir España
- Incentivos para startups: las empresas nuevas pagan un tipo reducido del 15% durante los dos primeros años con beneficios, lo que reduce los costes iniciales.
- Zonas francas y regímenes especiales: operar en zonas como Canarias puede implicar tasas impositivas muy bajas, atractivas para empresas de logística, comercio y tecnología.
- Conexiones internacionales: España tiene una ubicación estratégica para empresas que se quieren expandir hacia Europa, África y América Latina, con los que tienen tratados de doble tributación.
Impuestos Noruega vs. España para personas físicas o naturales
Las personas naturales en Noruega tienen la ventaja de gozar de un sistema fiscal simplificado con tasas moderadas y beneficios sociales extensos. En España, la carga fiscal puede ser más alta pero con varias deducciones en casos puntuales con más beneficios para familias grandes o trabajadores autónomos.
1. Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF)
Noruega:
- El sistema es progresivo, con una tasa base del 22% aplicable en todo el país. A esto se suman impuestos adicionales para quienes perciben mayores ingresos:
- 13.4% para ingresos entre 199.000 y 708.000 coronas noruegas ( 17.000-60.000 euros).
- 16.5% para ingresos superiores a 708.000 coronas noruegas.
- Los municipios también aplican un impuesto local que varía entre el 2% y el 8%, dependiendo de la ubicación.
España:
- El IRPF es progresivo, con tasas que oscilan entre el 19% para los primeros 12.450 euros y el 47% para ingresos superiores a 300.000 euros.
- Las comunidades autónomas tienen la potestad de ajustar las tasas agrandando la diferencia de costos entre regiones como Madrid y Cataluña.
- Existen deducciones por compra de vivienda habitual, familia numerosa, y gastos relacionados con el empleo
2. Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA)
Noruega:
- Tasa estándar del 25%, y un tipo reducido del 15% para productos básicos como alimentos.
- Servicios turísticos y actividades culturales tributan al 12%.
España:
- Tasa general del 21%, con tipos reducidos del 10% para servicios turísticos y alimentos procesados, y del 4% para bienes esenciales como pan y medicamentos.
3. Impuesto sobre el patrimonio
Noruega:
- Se aplica a personas con patrimonios superiores a 1.7 millones de coronas noruegas (aproximadamente 145.000 euros).
- Las tasas son progresivas, comenzando en el 0.85% sobre el patrimonio neto.
España:
- Este impuesto es aplicable sólo en ciertas comunidades autónomas. La exención general cubre hasta 700.000 euros, y el tipo impositivo varía entre el 0.2% y el 3.5%, dependiendo de la región y el nivel de patrimonio.
4. Impuestos sobre las ganancias patrimoniales y rendimientos de capital
Noruega:
- Las ganancias de capital, como la venta de propiedades o inversiones, están establecidas al 22%, salvo algunas excepciones específicas para la vivienda principal si se ha habitado por más de dos años.
España:
- Este impuesto varía entre el 19% y el 26%, dependiendo del importe de la ganancia. Las tasas más altas aplican a ganancias superiores a 200.000 euros.
5. Contribuciones a la Seguridad Social
Noruega:
- Los trabajadores pagan un 8% de sus ingresos brutos como contribución al seguro social. Esto cubre beneficios como la salud, pensiones y licencias parentales.
España:
- La tasa estándar para los empleados es del 6.35%, aunque esta puede variar según el tipo de contrato y el sector.
6. Impuestos específicos
Noruega:
- Impuesto sobre la herencia: se eliminó en 2014, pero aún existen impuestos indirectos para transferencias de bienes a herederos.
- Impuestos ambientales: Noruega establece un impuesto para las emisiones de carbono y fomenta prácticas sostenibles a través de incentivos.
España:
- Impuesto sobre sucesiones y donaciones: varía según la comunidad autónoma, con exenciones en Madrid y tipos altos en regiones como Andalucía.
- Impuesto sobre actos jurídicos documentados: aplica a la compra de viviendas y otros contratos legales.
¿Dónde es mejor tributar como persona física?
En términos generales, esta respuesta dependerá de las prioridades personales y situación específica en términos de ingresos. Noruega presenta una carga fiscal más baja, mientras que en los impuestos de España se imponen tasas más altas en los tramos superiores de ingresos, así como exenciones en ciertas regiones.
Razones para elegir Noruega
- Cargas fiscales predecibles: las tasas son nacionales y los impuestos locales están estandarizados.
- Beneficios sociales sólidos: los servicios como sanidad y educación son de alta calidad, lo que reduce la necesidad de gastos privados en estos rubros.
- Simplicidad del sistema: los procesos tributarios son claros y fáciles de navegar, con menos deducciones y excepciones que complican el cálculo.
Razones para elegir España
- Deducciones personalizadas: por vivienda, familia o inversión en negocios.
- Menores tasas para ingresos bajos: el primer tramo del 19% en España es más bajo que la tasa mínima en Noruega. Esto beneficia a quienes perciben ingresos menores.
- Clima y calidad de vida: para residentes extranjeros o jubilados, España puede ser preferible por el costo de vida y el clima.
Comparativa de impuestos Noruega vs. España
Noruega vs. España presentan sistemas muy distintos en cuanto a la tributación de las responsabilidades fiscales.
Las empresas o personas jurídicas están sometidas a tipos impositivos altos pero fijos en el país nórdico con la garantía de calidad de vida y seguridad social, mientras que España posee tasas fiscales como el IVA más bajos pero la mayoría de los impuestos son variables según la actividad económica, los ingresos generados y la región en la que vivas u opere tu negocio.
Mira de cerca nuestra comparativa de los diversos impuestos en ambos países para que saques tus conclusiones y elijas el sistema fiscal más oportuno para ti:
Impuestos Noruega vs. España para empresas
Impuesto | Noruega | España |
Impuesto sobre sociedades | 22% (tasa fija), 78% para empresas de recursos naturales | 25% (15% para nuevas empresas durante 2 años) |
IVA (Impuesto sobre el Valor Añadido) | 25% (15% alimentos, 12% turismo, transporte) | 21% (tipos reducidos en productos específicos) |
Contribuciones a la Seguridad Social | 14.1% de los salarios brutos | 29.9% – 31.9% según el sector |
Impuesto sobre Actividades Económicas (IAE) | 0% | Aplica a empresas que facturan más de un millón de euros |
Impuesto sobre dividendos y ganancias patrimoniales | 22% de retención sobre dividendos | 19% – 26% según la cantidad |
Impuestos Noruega vs. España para personas naturales
Impuesto | Noruega | España |
Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) | Progresivo: 22% + 13.4% – 16.5% según los ingresos | Progresivo: 19% – 47% según los ingresos |
Impuesto sobre el patrimonio | 0.85% – 1.1% para patrimonios superiores a 145.000 euros | 0.2% – 3.5% según la comunidad autónoma |
Impuesto sobre las ganancias patrimoniales | 22% sobre las ganancias de capital (exenciones para la vivienda principal) | 19% – 26% según el importe de la ganancia |
Contribuciones a la Seguridad Social | 8% de los ingresos brutos | 6.35% (variable según contrato y sector) |
IVA (Impuesto sobre el Valor Añadido) | 25% (15% alimentos, 12% transporte, turismo) | 21% (10% y 4% para productos específicos) |